Hoy hablamos cómo utilizar el flujo del comportamiento para conocer a los usuarios de tu página y mejorar la usabilidad.
EXPERTOS EN ANALÍTICA Y USABILIDAD
Te ayudamos a impulsar tu negocio online analizando tus visitas
¡CONTACTA AHORA!El éxito de tu negocio online depende de cómo actúen los usuarios en tu página web, así de simple y así de complicado. No importa si tienes una plataforma de comercio electrónico que venda productos directamente a los usuarios finales, una empresa B2B basada en unos servicios que tratan de construirse una reputación, o un negocio local tratando de posicionar su nombre y dirección en Internet. Cómo interactúan tus usuarios, hacia dónde van en tu página web afectará a la vida o la muerte de tu empresa. Si los usuarios nunca llegan a la página de contacto obviamente nunca se pondrán en contacto contigo. Si no pueden encontrar los productos que están buscando nunca los comprarán y si no llegan a encontrar la forma de pago de una forma fácil e intuitiva abandonarán el carrito y tu venta se verá truncada.
La comprensión de cómo interactúan los usuarios que visitan tu página web es un buen paso para solucionar el problema, si es que lo hubiera. Sin esta comprensión estarás ciego ante los problemas que pueden estar sucediendo con la usabilidad de tu página y, por lo tanto, las conversiones en ventas o contactos. No obstante se debería hurgar con algo más de profundidad que la mera comprensión superficial. Sólo a través de la comprensión profunda de los comportamientos y las motivaciones de tus clientes llegarás a ser capaz de corregir y cambiar aquello que falla.
Afortunadamente, hay una herramienta que puede ayudarte a responder tus preguntas. Y encima es “gratis”.
Dónde encontrar el Flujo del Comportamiento
El flujo del comportamiento es una herramienta analítica que podemos localizar en Google Analytics (siempre que tengas el script de Analytics instalado en tu página web, claro). Si lo tienes, porque lo tienes ¿verdad?, inicia sesión en Analytics y busca “Flujo de Comportamiento“ en la columna de la izquierda, debajo de la pestaña “Comportamiento” .
Una vez que lo tienes abierto, verás lo que parece ser una sección intimidantemente compleja.No te preocupes; es más sencillo de lo que parece. Las cajas verdes representan las páginas de tu web. Las líneas grises entre las cajas son “conexiones“, que muestran cómo los usuarios se desplazan de una página a otra dentro de tu web. Las líneas rojas que fluyen hacia afuera de las cajas verdes son “rebotes“, personas que abandonan la página en ese momento. Cada página se agrupa en columnas basadas en la etapa del proceso en el que se encuentran los usuario. Además tienes el punto de entrada a tu web a la izquierda y la progresión de la navegación en tu web si vas arrastrando la “mano” (el puntero) hacia tu derecha.
El punto de entrada
El punto de entrada es al que llama Google “Página de inicio“. Es la primera página que ven tus usuarios. Dependiendo cuál sea tu tipo de adquisición de tráfico más frecuente (posicionamiento web SEO, redes sociales, desde páginas que te referencian, Google Adwords u otras campañas CPC) el punto de entrada de tus usuarios será tu página de inicio, las noticias de tu blog o una página específica de destino (landing page) que hayas preparado para tal fin. Entender el punto de entrada puede ayudar a determinar cómo o por qué tus usuarios continúan “usando” tu página web.
Por ejemplo, si tus dos puntos de entrada más destacados son tu página de inicio y una noticia de tu blog y se observa una gran cantidad de visitantes que abandonan la home page mientras que los visitantes a tu blog continúan navegando hacia otras páginas, se puede inferir que tu página home no consigue realizar su objetivo de llamar la atención de los usuarios hacia un call to action , mientras que las entradas de tu blog sí lo hacen. Comparar tus puntos de entrada te dará una idea clara de qué páginas debes optimizar para sacar provecho a los usuarios que pasan por ahí.
La primera interacción
La primera interacción, como Google la llama, es la primera página que los usuarios de tu web visitaron después del “punto de entrada“. Por ejemplo, después de ver una noticia de tu blog, los usuarios pueden continuar leyendo otros posts o, también, después de entrar a tu web por la home page, quizá decidan (si has hecho bien tu trabajo) visitar tu tienda online.
Esta primera interacción debe alinearse directamente con tus objetivos. Si tu objetivo es vender productos tan rápido como sea posible, querrás que la primera interacción del usuario sea en la tienda online ya que es donde los usuarios tienen la oportunidad de comprar de forma inmediata. Si ese es tu objetivo, y en lugar de navegar hacia la tienda online observas que navegan hacia otro lugar, necesitas hacer ajustes importantes de forma inmediata. En otro ejemplo, si tu objetivo es construir tu reputación con tu marca personal o corporativa, querrás que se dirijan hacia tu blog, la sección de testimonios, portfolio de trabajos…
La segunda interacción… y más allá
Si en la primera interacción que te muestra Analytics, tus usuarios no van hacia donde deseas que vayan, la segunda interacción debe tomar el relevo. Por ejemplo, si el 60% de los visitantes a tu página cumplen el objetivo de uso deseado en la primera interacción, el 40% restante debería hacerlo en esta segunda interacción. Una vez más, si eso no ocurre, deberás de echar un vistazo con algún profesional en usabilidad web para ver el motivo por el cual la canalización de tráfico no sea la esperada y pretendida.
Si notas que los usuarios que visitan tu web llegan a una tercera, cuarta interacción (o hasta el infinito y más allá), por norma general podríamos concluir que tienes un serio problema con la estructura y diseño web en cuanto a usabiliad. Muy posiblemente tus usuarios no saben hacia dónde ir.
El Factor del porcentaje rebote
Si a través de Google Analytics, o cualquier otro programa de analítica web de los que existen en el mercado, observases que un porcentaje exageradamente alto de los usuarios abandonan tu web después de visitar una página específica, es una clara señal de alerta de que existe un problema, y grave, con esa página. Esto puede ser debido a una falta de información y de contenido convincente o de calidad. O tal vez un gran defecto en el diseño o programación web. Quizá tan sólo haga falta crear más enlaces o llamadas a la acción que atraigan a los usuarios y les inciten a continuar. Un porcentaje de rebote alto puede ser señal de un grave problema en tu web, pero también es uno de los problemas más fáciles de detectar y corregir. Presta atención a estos datos y actúa rápido.
Realización de ajustes significativos
Por supuesto, la comprensión de la información y obtener una visión de tu base de datos de usuarios es sólo el primer paso de un gran proceso y trabajo de analítica web. Vas a tener que hacer cambios constantes en tu página web si deseas mejorar. Las páginas web son seres vivos, dinámicos, y nunca se puede decir que están completamente finalizadas.
Observa con detenimiento tus páginas de mayor éxito, las que tienen un porcentaje de rebote inferior y también aquellas que llevan a un mayor porcentaje de usuarios a la página de destino que esté en tu objetivo. ¿Qué características y cualidades tienen esas páginas en comparación con las que tienen peores resultados? ¿tienen algún call to action más o menos? ¿existe algún elemento de diseño que es diferente? ¿más o menos texto? ¿un contenido más profesional? Si aun así tienes problemas para localizar el foco del problema puedes utilizar otros métodos como encuestas o mapas de calor.
Ojo, un detalle importante a tener en cuenta
Todo lo explicado en este artículo son generalizaciones. Existen circunstancias y casuísticas determinadas que pueden hacer que estas valoraciones cambien significativamente. Por ejemplo, en Coodex tenemos un cliente especialista en cirugía que ofrece a través de su portal web la contratación de operaciones quirúrgicas. En su caso particular, sus clientes antes de convertir (pedir una cita con el especialista) visitan un número alto de páginas. No siempre es posible que los usuarios conviertan nada más acceder a tu página web. Cada caso es independiente.
